domingo, 29 de mayo de 2011

domingo, 22 de mayo de 2011

FENÓMENO KÓSMICO INAUDITO

Informa nuestro perínclito colaborador Yanni Vhamos.- Sorprendente fenómeno espacial, al que podemos describir como una especie de descomunal niebla kòsmica de origen incierto, que se está extendiendo por la parte sudeste del universo a mano derecha. En cada planeta de cada galaxia de esta región, habitado por especies más o menos avanzadas, pueden observarse las más peculiares e indescriptibles mutaciones intelectuales entre las población. Individuos que, hasta ese momento no mostraban la más mínima inquietud filosófica, y ni siquiera un asomo de actitud crítica vital, una vez que han sido expuestos a la gran nube kòsmica, se convierten en autores posmodernos de discurso más bien ininteligible. Incluso los más vulgares proletarios son capaces ahora de hilvanar teorías sobre la fusión del espacio y el tiempo en la narración o sobre la percepción difusa de la realidad (y lindezas por el estilo que no les vamos a contar). Los cimientos de las civilizaciones kòsmicas se tambalean, ya que todas ellas están construidas sobre visiones totalizadoras y universalizantes, y ahora cualquier patán de tres al cuarto es capaz de poner en cuestión tales discursos y asegurar que el suyo particular vale tanto, o más, que aquellos. Las jerarquías kósmicas, vertebradoras de las teorías intelectuales más rígidas, las cuales aseguran un orden basado en el dominio, han manifestado cierto canguelo ante la que se avecina. Orson Otone, presidente de la Federación de Estados Planetarios Férreos y Monolíticos, sobre los que se ha ensañado la nube kósmica, ha hecho la siguiente declaración: "Únicamente una lógica dura y cerrada, basada en la idea del progreso, en hacer creer a la gente que va a algún sitio, impuesta desde las clases gobernantes (a las cuales, no viene al caso que yo pertenezca), puede asegurar el orden social. No podemos aceptar la libre interpretación de la realidad de cada individuo, ya que ello nos traerá el caos y, lo que es más importante, acabará con nuestra forma de vida (y no me refiero solo a nuestros privilegios, que también)". Los científicos más brillantes del Kòsmos han estado trabajando ya en el fenómeno espacial, aunque sin grandes resultados, ya que una vez expuestos a la toxicidad de la nube empiezan a cuestionar todo perspectiva metodológica establecida y a proclamar la superioridad del relativismo epistemológico (sea lo que sea que signifique eso). Lo que es seguro es que el Kòsmos no volverá a ser el mismo.

La gran nube kòsmica, que transforma los intelectos y relativiza la existencia.

sábado, 14 de mayo de 2011

miércoles, 11 de mayo de 2011

OTRO CASO DE INDIVIDUO NORMAL EN EL PLANETA KLINTON

Informa nuestro bisoño reportero Jerry Shuster.- Aunque no es el primer caso, sí parece que es uno de los más llamativos que se conocen en un mundo donde todos los individuos tienen poderes especiales. Bautizado por los medios con el nombre de "Vulgo", dada la costumbre klintoniana de tener un sobrenombre más o menos afortunado, Piotr Parkhedad es el nombre real de un tipo que ha ocupado los titulares de diversos medios sin haber destacado en nada apreciable, y que pide a gritos que le dejen llevar un vida de lo más corriente. Precisamente, es costumbre en la cultura klintoniana el que todos los individuos, caracterizados por poseer alguna habilidad extraordinaria y por vestir coloristas leotardos, con capa y antifaz a juego, acaben realizando alguna hazaña digna de ser mencionada. "Vulgo" parece demandar una existencia normal, sin heroicidades para él "cuestionables" o irrisorias, ni patéticas ínfulas heroicas, ni salidas de tono de ningún tipo, refugiado en el anonimato, en su trabajo diario y en sus diversas aficiones domésticas. Ninguno de los rasgos propios de los supertipos klintonianos se aprecia en este individuo: ni asomo de megalomanía, ni de ambigüedad sexual, ni siquiera un poquito de esquizofrenia ni de arrebatos violentos; una vida equilibrada en todos los aspectos caracteriza al bueno de Parkhedad, alias "Vulgo". Las mentes más rígidas e influyentes de Klinton han pedido que se juzgue ya a un individuo que no cumple con su función social, como ya tiempo atrás se realizó con Brus Bunny, más conocido como Hombre Gris, al que se acabó confinando en un centro de internamiento para el desarrollo de habilidades específicas e interviniendo quirúrgicamente para acoplar ciertos apéndices (de dudoso gusto estético, en opinión de muchos). Sin embargo, la cuestión central es que Bunny fue tratado sicológica y físicamente en aras de llevar una vida adecuada a la muy peculiar y estridente cultura klintoniana, y hoy es uno de los supertipos más llamativos de su localidad (y no nos referimos solo a su muy peculiar físico). "Vulgo" parece un caso mucho más severo, un hombre corriente sí, pero poseedor de una gran personalidad que le lleva a enfrentarse a toda una sociedad (y estamos hablando de una sociedad plagada de tipos desequilibrados que vuelan, trepan por las paredes y generan una considerable fuerza cuando se "excitan").

Dos klintonianos, en los que se puede apreciar todas las características habituales, incluida la muy evidente sublimación del instinto sexual.

domingo, 8 de mayo de 2011

domingo, 1 de mayo de 2011

LA TELEOLOGÍA COMO PROCESO TECNOLÓGICO

Informa Norbert Wiener.- El sistema totalitario que impera en el vasto planeta Kahlahorra, conocido como Grupo de Uniones Anexadas a la Ubicuidad, parece que no se ha quedado atrás en la carrera tecnológicA y armamentística que le hace competir con otros amplios sistemas políticos de control en el Kòsmos. Los científicos del GUAU aseguran, sin temblarles la barbilla, haber desarrollado la tecnología adecuada para controlar teleológicamente la historia en cualquier mundo conocido. Aunque, lógicamente, estos locos muchachos no han confirmado como pueden realizar tal cosa, convertir la historia de una civilización en un proceso concreto dirigido a determinada finalidad, es algo que ha llenado de estupor a propios y extraños. Tiene cierta lógica que un sistema de control absoluto, como es el GUAU, se haya empeñado en dar con la clave para convertir la historia en un sistema determinado hacia un fin, aunque no sepamos todavía cuál será éste, lo que nos sume en la mayor de las intranquilidades. El argumento teleológico era, hasta ahora, más propio de creencias religiosas en las que el Kòsmos sería un "diseño inteligente" (sic), con algún propósito inescrutable, de alguna  todopoderosa divinidad (una de las más seguidas es aquella en la que el "creador" adopta la forma de un espagueti gigante y todas nos hallamos subordinados a su voluntad). Este tipo de kòsmovisiones, ridiculizadas por la ciencia, impregnó de algún modo el pensamiento racional, y algunos filósofos y científicos, ilusos ellos, pensaron también que el desarrollo de la civilización nos llevaría a algún sitio más o menos decente. Es de suponer que resulta difícil aceptar que las leyes naturales sean producto más bien del azar, y que el orden en el universo es solo una posibilidad frente a otras muchas, por lo que la fantasía creativa de algunas especies kòsmicas, producto de tener demasiado tiempo libre para la especulación, ha trabajado de lo lindo a la hora de fabricar toda suerte de mitos y teorías. Ahora, lo que eran meras creencias y conjeturas, puede que ya no tengan cabida gracias a los avances científicos y tecnológicos del planeta Kahlahorra, y de su poderoso sistema político GUAU, que pueden ponerse al servicio de un férreo sistema de control en todo el Kòsmos. Es posible que cada individuo pase a ser solo una pieza más al servicio de una finalidad absoluta, tal vez solo unos pocos ingenuos se atrevan ya a desafiar los designios de una "inteligencia superior" (por llamarla de algún modo), a tratar de desviar un curso de la historia determinado por condiciones objetivas que trascienden al común de los mortales. ¿Suena mal? Muy bien no suena, no, ¿dónde queda la libertad?. "¿Libertad?, ¿para qué leches la queremos?", son unas de las más conocidas palabras, y muy significativas dado el caso, que pronunció Waldemar Ilyich Dalninski, uno de los líderes fundadores del GUAU. Efectivamente, es posible que la libertad sea solo una apariencia, que estemos formando ya parte de ese proceso global, que estas palabras formen parte de ese propósito teledirigido y estén también dirigidas a una finalidad. Seguiremos informando, aunque es posible que antes hayamos enloquecido.

Un técnico del sistema totalitario del GUAU, trabajando feliz al servicio de las condiciones objetivas, con una avanzada tecnología que ha superado todas las expectativas.